Seguimos con las entrevistas a los ex-Presidentes, y en está ocasión pasa por el sillón Nacho Lavernia, que fue presidente de ADCV desde 1992 a 1996 cogiendo el testigo a Pepe Gimeno. Una de sus principales labores fue la de atraer socios desde Castellón y Alicante.
ADCV es…
ADCV es nuestra voz colectiva y un nexo de unión, de contacto, de sinergias profesionales.
Diseño es…
El diseño ya se ha definido un montón de veces y supongo que todos los que estamos aquí lo sabemos. La cuestión es que las actividades y disciplinas que están involucradas en el ejercicio de esta profesión, y la propia oferta de diseño, están ampliándose y cambiando. Estamos en una etapa en la que el diseño se va a redefinir. Las asociaciones son un buen instrumento, además del trabajo diario, para conocer e incluso influir en esa nueva definición.
¿Cuántos socios había cuando fuiste presidente?
No recuerdo ni tengo el dato. Sí sé que hicimos un esfuerzo por atraer a profesionales de Alicante y de Castellón. Y se hicieron socios un buen número de ellos.
¿Cómo ves la asociación ahora en relación a como estaba cuando eras presidente?
Más sólida, más grande, más compacta…
¿Cuál crees que es el objetivo de los próximos 25 años?
Imagino que los objetivos seguirán siendo los mismos: promoción, formación, defensa de intereses colectivos… Pero pienso que el reto será adaptarse a los cambios, dar servicios para profesionales con nuevas necesidades.
Si pudieras ¿qué les dirías a los políticos ahora que no pudiste decirles en su momento?
Que no confundan su tarea. No están aquí para ganar elecciones.
Puedes decir en una frase ¿por qué hay que asociarse a la ADCV?
Porque la unión hace la fuerza y, además, es más divertido.